De acuerdo con lo estipulado científicamente en genética , se considera que las uniones son consanguíneas si se hacen hasta el nivel de tatarabuelos en las ramas del padre o de la madre .

En las palomas procedentes de una línea A y son de la generación de los biznietos o de tataranietos , entonces sus uniones siguen siendo consanguíneas . A nivel de Biznietos la consanguinidad es del 1/8 en sangre común y a nivel de Tataranietos es del orden del 1/16 .

Una regla de oro en consanguinidad para no tener problemas degenerativos es que al final el producto obtenido tenga como máximo como sangre común un 1/3-1/2 ( 33-50% ) . No obstante en su proceso consanguíneo puede haber en la rama paternal o maternal uniones intermedias con sangre común del orden del 50-75% .

Conozco palomares que parten de unos troncos genéticos cuyas ramas actuales son a nivel de uniones de nietos y biznietos , las cuales según el profesor húngaro Alfons Anker y su discípulo Steven van Breemen son las mejores para trabajar ya que no dan desechos y se mejora la calidad de las palomas ensayadas . Otra unión muy buena pero más peligrosa es la de Tio-Sobrina pero debemos asegurarnos todavía más que tienen muy buena vitalidad . Su descendientes sirven para la competición y para la cría con un 75% de pureza .

Lo mismo que hemos hecho con el cruce entre nietos podríamos hacerlo con nietos y biznietos , con bisnietos y con biznietos y tataranietos . Por eso que nunca perderíamos nuestras líneas e incluso las podríamos mejorar introduciendo de vez en cuando alguna paloma con sangre diferente para revitalizarlas y de nuevo volver a nuestros orígenes .

Ya han pasado más de 30 años que llegaron unos cuantos Bricoux a Menorca y todavía los mantengo en consanguinidad cruzándolos con nuevas sangres para que no degeneren pero manteniendo perfectamente su genotipo y fenotipo y su descendencia rinde bien en las competiciones en Menorca y la península .




J.J.JUSUÉ