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COMPORTAMIENTO DE HUIDA
- Feb 12 2010


Comportamiento de huida es la actitud de la paloma mensajera para alejarse lo mas lejos posible de una situación aparentemente peligrosa , ya sea ruido, animal, persona u objeto que aparece inesperadamente ante la paloma .
Cuando la paloma presiente un peligro, se pone tersa, con todos sus nervios en tensión y dispuesta a tomar una bocanada de aire para saltar y huir. En esta situación la paloma mantiene erguida al máximo su cabeza para hacer mas efectiva su visión. La paloma dispuesta a “asegurar su vida” huyendo no pierde de vista el motivo de su miedo y preocupación y emite un leve pero perceptible sonido de aviso de peligro que pone en alerta y preaviso al resto de palomas cercanas.
Cuando la situación de peligro es mas que evidente, el bando huye saltando al unísono . Pero si la situación de peligro no es tan evidente , saltan huyendo las palomas que han percibido ese peligro , pero en cuestión de décimas de segundo , el resto de palomas chequea la situación y secundan o no a las primeras, o simplemente saltan por “efecto simpático” al ver huir a sus compañeras.
En un bando grande, los saltos de huida son proporcionalmente mas frecuentes que en un bando pequeño, pues siempre hay saltos de huida sin motivo aparente, de modo que a mayor número de palomas , mayor número de saltos con o sin motivo.
Cuando las palomas no se encuentran en sus zonas habituales (concursos) , se hallan en situación mucho mas tensa de vigilancia que cuando están en su tejado o alrededores . En los saltos de huida , las palomas siempre vuelan a velocidades superiores que en las salidas normales.
Las situaciones desencadenantes de huida son fáciles de analizar observando a nuestras palomas y estando atentos a cuanto acontece en las zonas circundantes.
Como les sucede a todos los vertebrados superiores, las palomas mensajeras se aterrorizan ante lo desconocido y por tanto han de vencer sus enormes miedos cuando están de viaje y tienen que hacer noche o posarse para comer o beber en zonas desconocidas..
Cualquier objeto grande que se deje ver de súbito e inesperadamente , ya sea un vehículo ,la silueta de una rapaz ,la bandera etc,es un desencadenante de huida; cada objeto que se perfile de improviso como una silueta oscura contra el cielo, genera intranquilidad y predisposición a huir.
La forma del objeto causante de la huida, es mucho menos importante que la frecuencia de su aparición. A veces mis palomas emprenden la huida ante la inesperada presencia de una garcilla bueyera o un simple abejarruco, y sin embargo, cuando las rapaces vuelan por decenas por encima de mi palomar en sus migraciones a Africa , se ponen en tensión obviamente , pero no huyen despavoridas, se limitan a torcer el cuello sin dejar de mirar al cielo hasta que el peligro ha desaparecido,y por el contrario el chillido de alarma de un mirlo o los alocados gritos de las cotorras argentinas invasoras consiguen que el bando se ponga en huida.
Una piedra que caiga en el tejado del palomar , o un ruido inesperado cerca del tejado , nos puede originar una huida colectiva que puede desembocar en “estampida”, que hace que las palomas vuelen y vuelen incluso de noche , con un miedo atávico a posarse en su tejado y parando solo cuando exhaustas ya no pueden mas o un edificio o un cable invisible en la oscuridad les pare en seco en su alocada huida.
FELIX MARTIN Vilches